viernes, 16 de agosto de 2013

Condenado a ilusionarse



Hace unos pocos años vinieron al Sevilla unos cuantos jugadores, alguno desechado como Saviola, otros que habían fracasado después de su alta cotización como Luis Fabiano, un gigantón al que pocos conocían que se llamaba Kanoute, se integraron canteranos como Kepa, Jesús Navas, o Antonio puerta, se vendieron jugadores como Sergio Ramos considerado el mejor central de España y Julio Baptista, después de la campaña realizada.

A parte de estos jugadores y alguno que vino más, estaban Javi Navarro, Marti, Jordi, David Castedo y aquellos que nos subieron a primera, mas un chico que estaba por despuntar, del que muchos se reían, quizás al principio por su mal posicionamiento, pero si desparpajo, un tal Dani Alves.

Aquel equipo con un entrenador que había estado en el eterno rival, y que se le acusaba más de guardar el resultado que de jugar al fútbol, era una incógnita.

Muchos auguraban que tras la marcha de Reyes el año anterior y la de Baptista y Sergio Ramos, el equipo bajaría mucho el nivel. Pero una buena gestión nos llevo el 2005 a ganar la Uefa y declararnos equipo grande, no solo en España, si no a nivel mundial, después de aquello vinieron otros cinco más que nos dieron una gran satisfacción.

Hoy día y cerrando el fichaje de Iborra, cediendo a Baba al mismo equipo, de nuevo y tras grandes ventas, casi una columna vertebral de un equipo. Se ha vuelto hacer un equipo con gente contrastada y gente que viene con hambre a triunfar en el Sevilla.

Además veo un entrenador que se sale del guión Del nido y quiere a más jugadores, quiere triunfar de nuevo con este Sevilla Europeo.


Por lo que creo que estamos condenados a ilusionarnos, a pensar de nuevo que este año si se puede conseguir un titulo, a pensarlo nosotros los de pie, y a respetar que los que mandan tengan prudencia y anden con pies de plomo.