1890-1917 El primer antecedente del balompié en la ciudad hispalense, data de 1890, quince años antes de la creación del Sevilla F.C. Un equipo de la ciudad, formado en su mayoría por jugadores ingleses, se enfrentó al Recreation Club de Huelva, también plagado de británicos en un partido celebrado en la Dehesa de Tablada, fuera de la ciudad. Allí tuvieron que desplazarse los jugadores y numeroso público en coches de caballos. El resultado final fue de dos goles a cero a favor del conjunto local, y los hombres que pasaron a la historia por actuar en este primer encuentro fueron:
SEVILLA: Macoil; Logan, Stroulger; Rikson, Auindall, Mandi; White, Welton, Greig, Stugart y Nicholson.
HUELVA RECREATION CLUB: Alcok; Yates, Wakelin; Duclos (español), Coto, Kirk (español); Daniels, Cutss, Gibbon, Rádley y Smith.
Un año más tarde, ambos equipos volverían a enfrentarse, esta vez en Huelva, y el resultado favoreció al conjunto onubense. Lo mismo ocurriría en un tercer partido, disputado de nuevo en terreno sevillano.
El Futbol arribó a Sevilla de la mano de sus propios inventores, los ingleses. A primeros de siglo, cuatro ciudadanos británicos, Mr. Wood, Mr. Landon, Mr. Hamick y Mr. Mckensie, comienzan a practicar este deporte en un terreno situado detrás de una fábrica de cristales que existía en La Trinidad. Las dificultades con las que se encontraban eran numerosas; desde tener que cargar con las piedras o los palos necesarios para marcar las porterías, hasta ser tomados a mofa por el resto de la población, a la que le parecía bastante anormal que unos hombres se exhibieran en pantalones cortos en lugares públicos. La flema británica supo ignorar todo esto, y pronto consiguieron que los propios ciudadanos andaluces practicaran sin vergüenza este deporte.
La creación del club
Poco a poco el Foot-Ball va adquiriendo seguidores en la ciudad hispalense. En poco tiempo, un nutrido grupo de sevillanos comienzan a plantearse la posibilidad de crear oficialmente un club que representara a la capital andaluza; nombres como Joaquín Valenzuela, Benito Romero, los hermanos Laffita, José María Castañeda o Paco Alba, se unieron al de José Luis Gallego para hacer realidad esta idea. Las reuniones, se celebraban en el bar Tupinamba, propiedad del futuro presidente del club, José Miró, o en el propio domicilio de Paco Alba. Carecían de toda oficialidad, y se caracterizaban por un clima de total distensión y buen humor.
De esta manera, cuando el pueblo sevillano estaba pendiente de la boda de Alfonso XIII, la retirada del torero Chicuelo, o de la visita a Sevilla de la Reina Alejandra de Inglaterra, en 1905, la fundación del club se hará realidad. En septiembre de este año, son redactados los Estatutos por un equipo, al mando del cual estaba Paco Alba, cabeza sobresaliente en la creación de la entidad. El día 14 de octubre es una jornada grande para el conjunto andaluz; el Gobernador Civil, don José Contreras Carmona, aprueba dichos Estatutos, de tal manera que la sociedad queda instituida oficialmente. En este acto, José Luis Gallego fue elegido primer presidente del Sevilla, y leyó un discurso en el que destacó el ideal interclasista de la entidad; «Todos los hombres, de cualquier nivel social, ideas religiosas o políticas, tendrán aquí cabida». En la primera Asamblea oficial, y de carácter más riguroso que las reuniones anteriores, se acordó que la sede del club se ubicaría en los locales de la Calle Sierpes, 69.
El Sevilla F.C. era el sexto equipo en España en ver la luz; además, ya poseía un escudo, diseñado por uno de los fundadores, Pepe Laffita, consistente en un balón, con un escudo en el centro muy similar al actual.
El Sevilla empieza a caminar
No era fácil en aquella época encontrar un rival para organizar un partido de fútbol; la escasez de equipos en España y la dificultad de desplazamiento para aquellos existentes, hacía que el conjunto sevillista tuviera que conformarse con jugar encuentros de carácter amistoso,
Por simple diversión. En estos años se E hizo famosa la expresión de «rondas de los sábados», que expresaba el que los miembros de la Directiva del Club tuvieran que buscar personalmente a los jugadores, para indicárles la hora a la que debían presentarse en el campo.
Pero esto no eran suficientes, tanto los jugadores como los seguidores, que cada vez eran mayor número, deseaban enfrentarse a equipos de categoría; así comenzó la búsqueda desesperada de un contrario. Tras no pocos esfuerzos, se consiguió acordar con el equipo más cercano, el Recreation Club de Huelva, un enfrentamiento amistoso.
En 1908 se celebró este partido histórico para la entidad, su primer encuentro «serio». Se disputó en Sevilla, en los terrenos del Hipódromo de Tablada, y la - recaudación se destinó a un fin edificante, los damnificados de la catástrofe del terremoto de Messina.
La alineación sevillista en este glorioso encuentro fue la siguiente:
Valenzuela; Querbu, Benito, Romero; po Castañeda, García Martínez, Montoto; ev, Mckensie, Paco Alba, Wood, Bezard y lis Pepe Laffita.
El guardameta Valenzuela hizo las (veces de entrenador, convirtiéndose así mí en el primero que desempeñó dicha función en el conjunto hispalense. Por supuesto, el Sevilla vistió con camiseta y blanca, calzón blanco, colores que mantiene hasta sin la actualidad.
1 comentario:
¿En 1908 el partido de Messina?
¡Anda ya!
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